
El bohemio que aterrorizaba sobre los tableros
Bebedor y poco amigo de la disciplina, Mikhail Tahl fue campeón mundial de ajedrez sembrando anarquía en las partidas. En tiempos de programas de ajedrez invencibles y de ajedrecistas eficaces como robots, declamamos nuestro amor por Mikhail Tahl, un genio plagado de defectos y debilidades, el último romántico del llamado –perdón por …[continuar leyendo]